Roces, fricciones, choques, calentamientos, enfrentamientos,…
Cada día, en cada momento confluyen dos tipos de relaciones: con el otro y con nosotros.
En ocasiones a nosotros mismos nos boicoteamos, nos agredimos con la comida o con lo que vemos o escuchamos, con lo que nos ponemos… en definitiva, nos auto-lesioanmos.
En ocasiones con el otro también aparecen los roces. No es lo que el otro diga, sino el cómo tú lo interpretas y lo haces tuyo.
Somos vibración y tendríamos que comportarnos como las ondas en el agua que hacen su camino. Sin embargo, somos en el día a día más bien piedras que chocan y se pulen, que generan polvo, residuos que de manera continua nos hacen volver al pasado.
Fluyamos con la vida, como fluyen esas ondas
¿Desde donde interpretan las personas para no poder fluir con la vida?
Roces, fricciones, choques, calentamientos, enfrentamientos,…
El I Ching dice que: "las diferentes opiniones son la motivación para llegar al mutuo acuerdo". Siempre he sentido esta frase muy dentro. Si bien el inicio de la conversación pudiera llevarnos a mal entendidos, en mí siempre ha estado buscar el lado positivo, el acuerdo, el encuentro.
Pero, hoy en día, vemos discrepancias desde juicios, no desde razonamientos lógicos de mente clara.
La RAE define interpretar como: "Explicar acciones, dichos o sucesos que pueden ser entendidos de diferentes modos". En el siguiente audio el Dr. Cayo nos aclara desde dónde interpretan las personas.
Cuando estas explicaciones y aclaraciones son fruto de los sentimientos turbios y oscuros de una persona es cuando se tergiversa todo, y nos lleva al caos y la confusión.
Si los sentimientos son cristal, limpios, transparentes, sin juicios trasmitirá una información desde la propia observación, desde el análisis de datos, con mente científica.
La observación del otro, del mundo
siempre parte de la de uno mismo.
Todos, y especialmente los niños, necesitan una comunicación clara, directa, sencilla, con los datos que necesitamos.
Hoy vivimos en un mundo donde el maquillaje, la máscara, el envoltorio pesa más que el diamante que ofrecemos.
Seamos naturales en la comunicación.
Fluyamos y dejemos fluir.
De mi ventana a tu ventana.
Desde mi mirada a tu mirada
Desde mi realidad a tu realidad
Desde mi aquí y ahora a tu aquí y ahora.
by Paz
by edicionestndr
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